Se que lo dije y lo confesaré:
...Jure ante el espejo del hielo con mi aversión indolora e incolora, que no volvería a echar los pasos atrás, pues el pasado ya sólo me dilaceraba...
...Clave mi mirada en el reflejo sin romper y jure no volver a enamorarme de ti, ni a dejarme llevar por el río inconsciente de las consciencias apegadas intentando disipar mi edulcorada ternura, ni a dejarlo todo para el último día...
...Recuerdo, y es verdad, que me dí la vuelta y observé mi sonrisa luchadora en este combate en soledad, que me decía, no volverás a vestir este traje negro en tu lengua de gato, ni te disfrazarás de liebre en viajes finitos buscando el centro de tu propio interior...
...Jure, una vez más, que echaría de menos el antídoto de los lunes por la mañana, para sentir que la vida aún tenía más sentido del que yo le daba, pero que sólo lo echaría de menos y, una vez más, la mirada se clavo, sonrió y me dijo que ahora sólo quedaba recobrar la vista otra vez, hacer las maletas y empezar la mudanza al jueves de al lado que tampoco está tan mal, para luego sorber, poco a poco, vasos de tequila en noches infames con gatos nocturnos y conversaciones en caballerías de palacio...
...Clave mi mirada en el reflejo sin romper y jure no volver a enamorarme de ti, ni a dejarme llevar por el río inconsciente de las consciencias apegadas intentando disipar mi edulcorada ternura, ni a dejarlo todo para el último día...
...Recuerdo, y es verdad, que me dí la vuelta y observé mi sonrisa luchadora en este combate en soledad, que me decía, no volverás a vestir este traje negro en tu lengua de gato, ni te disfrazarás de liebre en viajes finitos buscando el centro de tu propio interior...
...Jure, una vez más, que echaría de menos el antídoto de los lunes por la mañana, para sentir que la vida aún tenía más sentido del que yo le daba, pero que sólo lo echaría de menos y, una vez más, la mirada se clavo, sonrió y me dijo que ahora sólo quedaba recobrar la vista otra vez, hacer las maletas y empezar la mudanza al jueves de al lado que tampoco está tan mal, para luego sorber, poco a poco, vasos de tequila en noches infames con gatos nocturnos y conversaciones en caballerías de palacio...
...Otra vez se ofrece mi alma desnuda
a los pasos introspectivos
desde el balcón de la casa de los ciegos
arropados con la manta del miedo
y la venda de la seguridad...
a los pasos introspectivos
desde el balcón de la casa de los ciegos
arropados con la manta del miedo
y la venda de la seguridad...